Una vez detectado que algún alumno o alumna presenta dificultades considerando la lista de observación realizada toca establecer las estrategias didácticas para atender al alumnado que presenta dificultades. En el ámbito de los ciclos formativos de grado superior las intervenciones son muy delicadas, porque dependiendo de la dificultad de aprendizaje que presente el alumno o alumna puede generar un conflicto de intereses en el aula, cabe recordar que estamos en enseñanzas no obligatorias donde no hay posibilidad inmediata de ser atendidos por algún orientador u orientadora.
Las estrategias didácticas a considerar para atender las dificultades de aprendizaje en las enseñanzas no obligatorias pasan por resolver las clases teóricas y las clases prácticas.
Las actuaciones en las clase teóricas deben combinar la exposición verbal con la realización de microtareas en tramos de tiempo pequeños. En este caso se trata de controlar la atención y mejorarla. No debemos olvidar que hay alumnos y alumnas que pueden sentirse molestos al ver que le explicación de un concepto o tarea puede dilatarse. Es importante que la clase sea dinámica y haya pocos espacios de tiempo sin actividad. Todas las clases debe iniciarse con la exposición del guion de clase, el alumnado debe saber que va aprender ese día, por qué y para qué. Si el guion está escrito en la pizarra mejor, pues sirve de línea de tiempo para el alumnado, especialmente para el que tiene dificultades, pues es una forma de saber en que punto se encuentra la exposición. Una vez establecida la dinámica de clase la estructura debe tender a ser predictiva por parte del alumnado.
Durante la realización de tareas prácticas nos encontramos con la disyuntiva de distribuir el tiempo de atención entre el alumnado. Aunque se dan las pautas necesarias para realización de las tareas de manera secuencial, es decir, se explica como abordar aquello que se ha de hacer, los alumnos que presentan dificultades son menos autónomos en términos generales. Para corregir esta incidencia y otras análogas las tareas deben mostrarse desglosadas para que se identifique la secuencia de las acciones que se tienen que llevar a cabo.
En resumen, las estrategias metodológicas para atender al alumnado de las enseñanzas no obligatorias con dificultades de aprendizaje consiste en:
- Disponer los contenidos y tareas en unidades de contenido y acciones más pequeñas de manera asequible.
- Hacer visible el guion de clase cuando se imparte la clase teórica.
- Disponer de un diario de clase accesible para el alumnado.
- Hacer predictiva la clase al mismo tiempo que dinámica.
- Hacer tramos más cortos de exposición verbal intercalando prácticas.
Es evidente que cada alumna y alumna requerirá de una atención propia en base a su dificultad y para eso se requiere de la implicación del alumno o alumna, son mayores de edad y no podemos recurrir a los tutores legales y a eso le debemos sumar la ausencia de un equipo de orientación en las enseñanzas de Artes Plásticas y Diseño.